lunes, 13 de abril de 2009

Un día oscuro



Quisiera hoy convertirme en estatua, para dejar
de sentir toda la vida, porque cuando no se espera,
nada es posible

.
Quisiera hoy permanecer inmóvil y silencioso, porque
hay vivencias que si no se verbalizan parece que
nunca llegaron a suceder

.
Quisiera hoy sentir sólo el rumor del mar, que me
arranque los recuerdos que quedaron de aquel tiempo
y me lleve el sentimiento desamparado muy lejos

.
Quisiera ahora atrapar todas las dudas que vuelan
como pompas de jabón, para redimir el consuelo
aunque sea en interrogante

.
Quisiera en esta mañana de bruma lisa, andando por
el fondo de un abismo que me engulle, pensar que
sólo fue un sueño y transformarlo en olvido

.
Quisiera que el único olor que me invada sea el del
salitre que lave la nostalgia, porque las penas del
alma no tienen cura

.
Hoy quisiera no fijarme en nada, pasar sólo de largo
como una ráfaga de ausencia, pero no siempre se
puede elegir el pasado

.
Me quedé en el mar, atado a las miradas calladas,
esas que duran una eternidad y traspasan la misma
línea azul del horizonte

.
Me quedé con la brisa del manto blanco de sal, viendo
pasar la vida y pensando en las cosas que se quedan
perdidas para siempre

.
Me quedé sin palabras, las que no se encuentran,
cuando sabes que servirán de poco, porque hay
dudas más poderosas que todos los argumentos juntos

.
Me quede sin impulso, en la nada, en medio de las
urgencias, esas difíciles de describir en silencio cuando
se multa la esperanza

.
Me quedé en mitad del camino indefinido, encharcado
de sentimientos solitarios, donde sólo se respira el
viento sin remedio.


Y sintió que su alma se alejaba sin prisa incapaz de
doblegar el destino, hasta algún sitio donde la tristeza
no pudiera arrebatarle los sueños de su propio reino,
sin poder hacer preguntas para no tener que escuchar
respuestas que le llevarían a un abismo emocional.
Ella prefirió esperar y no dejó en el cielo más que los
colores encendidos que gritaban su pena, marcando
la distancia de aquella dolorosa intimidad vulnerada
que nunca supo descifrar y que poco a poco se hizo
inalcanzable. Porque el sentimiento se corroe cuando
se divide y late por otras venas, hasta morir en el infinito
como humo vencido que se llevan los alisios, dejando
simplemente la aureola de los recuerdos fundidos en cada
suspiro que resuenan como un eco en la memoria


Pablo Neruda

3 comentarios:

  1. Uffff,....
    Tras leer esto, no quisiera sentirme así.

    Lo que suelo hacer es mirar al mar y cargarme de su energía positiva.

    Y sonreir a la vida. Me gusta sentirme bien, y quisiera contagiarte esto con mis palabras.

    Un abrazo, Pluvis, con una sonrisa de amistad virtual, pero real.

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  2. Suena muy bonito, muy poético , y más viniendo de alguien como Pablo Neruda, pero no es bueno llenarse de esos pensamientos negativos, hasta hacer estallar las emociones.

    Hay que disfrutar de lo bueno que ofrece la vida y dejar pasar de largo la oscuridad del pesimismo.

    Un abrazo.

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  3. Buffff, ¡¡¡como estaba eses día!!!

    Gracias por estar ahí

    Un abrazo genade

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