Foto: Keith Carter |
Janne...
Piensa en Janne.
En que se empieza a hacer mayor, en que ambos se estan haciendo mayores.
Siente deseos de incorporarse y llamarlo, pero sabe que está dormido, o en la central o...quiza...Daniel. No; la de esta noche no es esa clase de soledad, sino otra mucho peor. Es la soledad auténtica.
...se coloca los auriculares...pero antes de que acabe la canción se los quita...coge el teléfono y llama a Janne... escucha su voz, es la única necesaría, dulce y tranquila, infunde seguridad, Su voz es un regazo.
Fragmento de Sacrificio de invierno
de Mons Kallentoft
Una soledad mucho peor: La soledad auténtica.
ResponderEliminarPor dura que resulte, sólo cuando seamos capaces de estar solos durante un tiempo, sin depender de los demás... estaremos realmente preparados para compartir nuestra vida con alguien.
Cariños varios, amiga mía.
Vacío,voces y un brazo extendido en la oscuridad de la soledad.Seguro que son momentos duros.
ResponderEliminarAbrazos y saludos afectuosos!
Juglar
ResponderEliminarTotalmente cierto, aunque a los humanos nos cuesta madurar...
Besos
Antonio
ResponderEliminarA veces e maximizan, pero depende del dia y de nuestras emociones ...
Un abrazo
Mientras sepamos que hay una voz cálida y acogedora al otro lado del teléfono, tendremos la certeza de que la oscuridad no nos ha enredado en su telaraña.
ResponderEliminarUn abrazo apretao
Carmen
ResponderEliminarSi, el tmeor es no poder escucharla...
Una brazo guapina