Leif Podhajsky collage |
Un hombre de la costa de Neguá, en la costa de Colombia, pudo subir al alto cielo. A la vuelta, contó. Dijo que había contemplado, desde allá arriba, la vida humana. Y dijo que somos un mar de fueguitos.
-El mundo es eso-reveló-. Un montón de gente, un mar de fueguitos.
Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás. No hay dos fueguitos iguales. Hay fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de fuego loco, que llena el aire de chispas. Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se enciende.
Fragmento: El libro de los abrazos
E. Galeano
via tecnicolor
Quién arde y, a la vez, donan su fuego.
ResponderEliminarBesos
No hay dos fuegos iguales.
ResponderEliminarPor eso crecemos en la comunicación con los demás.
Un texto magnífico, Pluvisca.
Cariños varios, mi niña.
Mira que me gusta cómo habla y como escribe Eduardo Galeano. Este fragmento está lleno de razón y de poesía.
ResponderEliminarUn beset
El tuyo se siente desde aquí...
ResponderEliminarbesos
Bello Galeano, éste cuento de los fueguitos nos hace reflexionar en la maravilla humana.
ResponderEliminarTodos diferentes, de ahí el aprendizaje en la comunicación con el otro.
Espectacular imagen.
un abrazo Teresa.
Precioso fragmento de Galeano.
ResponderEliminarTodos los fueguecitos necesitamos del oxígeno de la vida para brillar.Aunque hoy en día hay muchos "fuegos" artificiales.
Abrazos y saludos afectuosos!
Trini
ResponderEliminarSi, es un alimentarse mutuamente.
Besos
Juglar
ResponderEliminarSomos animales sociales...aunque parece que estamos perdiendo la capacidad de comunicarnos se manera enriquecedora.
Besos
Ximo
ResponderEliminarGaleano tiene una sensibilidad especial
Petons
De cenizas
ResponderEliminarGracias!!! y rl tuyo, siempre es cosa de dos.
Besos
Adriana Alba
ResponderEliminarTu siempre tanpositiva y alegre, transmites energia de la buena Alba
Un abrazo
Antonio
ResponderEliminarMucha traca ahy alguno dias si, demasiada...
Besos
Pero qué delicia de texto, me ha encantado! Desde luego yo sabía que había luciérnagas y que su luz era tan intensa y maravillosa que acaricia y calienta corazones.Ahora entiendo lo de los "fueguitos". Que bella manera de definirlo.
ResponderEliminarLeeré el libro, alguien me lo recomendó pero no llegué a buscarlo.
Abrazos para ti "ser mágico lleno de luz"!
Beatriz
ResponderEliminarGaleano es todo sensibilidad y dulzura.
Un abrazo a ti mi niña llena de sensibilidad
Hace tiempo coloqué este texto en mi blog con una foto de una exposición que visité... (siéntate que se me ha soltado la tecla jajaja) en ella, una máquina registraba la frecuencia cardiaca de cada persona y la convertía en guiños de luz en un ciento de bombillas que colgaban del techo. Una bombilla con corazón. Y me acordé de Galeano, de sus fueguitos, del que todos llevamos dentro, de la luz y el calor que desprenden algunos...como el tuyo : )
ResponderEliminarUn gran besote
ShaO
ResponderEliminarQué guay niña!!! tengo que ver tu entrada, a ver si la encuentro para ver la imagen
Un abrazo guapa
http://mardeazucar.blogspot.com/2009/05/fueguitos.html
ResponderEliminaranda que casi ni la encuentro jajaja (el día q tenga tiempo llegaré ahí arreglando los desaguisados que monto cada vez que varío el diseño XP) Un besote mi guapis
ShaO
ResponderEliminarYa te escibií en el post
me ha encantado lo de las bombillas, que pasada!!!
besos y un abrazo guapina