jueves, 1 de octubre de 2009

Amor a primera vista



Pintura: Sergey Marshennikov

Antes, viajaba siempre con mi almohada, es que
si no me costaba la tira dormir.


En el viaje a Grecia, se me olvidó, y cuando me
di cuenta...bufff...


Decidimos salir a comprar uno, pues la del hotel
era horrorosa.


Venga entrar en tiendas y en tiendas y aparte de
que, no sabiamos un pijo de ingles, siempre nos
sacaban lo mismo...almohadoncitos con dibujines
para poner en el sofa.. ¡¡¡claro, eramos turistas!!!


Dos horas después, cansados y aburridos, nos
metimos por una callejuela del barrio antiguo de
Atenas, y vimos una tiendecilla pequeña en dónde
nada estaba en ingles, todo en griego...pero como
tenian ropa de cama, entramos...logicamente
volvieron a sacarnos almohadones de adorno, con
banderitas griegas y demás, pero yo insistí y con
mi mímica le dije que era para dormir...incluso me
tumbé enel suelo e hice como que dormía...

La dependienta flipaba...pero desapareció y a
los dos minutos vino con una almohada ...

¡¡¡Era ella!!! ¡¡¡mi almohada griega!!!, no había
duda, le dije que era preciosa que nos la
quedabamos, que la metiera en una bolsa sin
envolver...yo creo que aún le cuenta a sus nietos
que vino una loca española a la tienda y se llevo
un almohadon para dormir...


Lo cierto es que aún lo uso para dormir y ya es
viejecin pues de eso hace mas de 20 años


Teresa

2 comentarios:

  1. Hay que ver como nos apegamos a nuestros objetos o manías...¡habría que verte mimiqueando! ¡Todo un espectáculo!

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  2. Ni te lo imaginas...cuando lo pienso aún me rio.

    ¡¡¡Pantalones!!!

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