viernes, 20 de agosto de 2010

El chino y el arroz



















Ilustración:Marcel Lorange


La persona que cambia puede equivocarse,

pero la que no cambia nunca, vive equivocada".


EL CHINO Y EL ARROZ

Un hombre estaba poniendo flores en la tumba
de su esposa,cuando vio a un hombre chino
poniendo un plato con arroz en la tumba vecina.

El hombre se dirigió al chino y le preguntó:

-'Disculpe señor, ¿de verdad cree usted que el
difunto vendrá a comer el arroz?...

- -'Sí', responde el chino, 'cuando el suyo venga
a oler sus flores...

Respetar las opiniones del otro, es una de las
mayores virtudes que un ser humano puede tener.

Las personas son diferentes, por lo tanto
actúan diferente y piensan diferente.


No juzgues...solamente comprende..., y si no
lo puedes comprender... OLVÍDALO .



Leyenda china

13 comentarios:

  1. El respeto es la base de una buena convivencia, y como decia la madre Teresa, " si juzgas a la gente, no tienes tiempo para amarla".
    Todo esto suena muy bien, pero resulta dificil de llevar a cabo.
    Soy respetuosa, con los que lo son conmigo.
    y no juzgo si no soy juzgada y condenada.
    Todo es un toma y daca.
    Un beso Pluvis.

    ResponderEliminar
  2. la esencia es difícil que cambie, cuando cumpla 60 (por ejemplo) puede que piense otra cosa

    pero sin duda vamos "evolucionando"

    creo que con las experiencias propias y ajenas esta evolución es a mejor, aunque conozco alguna excepción para confirmar la regla


    el respeto debe primar y es una estupenda opción la de pasar página, aunque no sea fácil a veces

    ResponderEliminar
  3. Esta leyenda china la leí tiempo atrás y me encantó.
    Siempre hay que intentar ver las cosas desde todos los ángulos posibles, no podemos ceñirnos a nuestra única perspectiva. Si te ciñes a tus principios e ideas y pretendes juzgar el resto del mundo según dicho patrón, pocos habrá que concuerden. Cada cual vivimos y actuamos conforme a nuestras convicciones, pero jamás podemos creer que son las autenticas ni las acertadas y rechazar las opiniones de los demás. Todos poseemos una verdad relativa, solo hace falta enfocarnos en la dirección de dicha verdad para darnos cuenta de cualquiera de ellas es correcta.
    Un besito

    ResponderEliminar
  4. Te deje una aclaración en la entrada anterior
    besos

    ResponderEliminar
  5. Respetar las opiniones del otro, es una de lasmayores virtudes que un ser humano puede tener,

    Una buena lección princesa, ya la conocia, pero me encanto verla aqui.

    besitos

    ResponderEliminar
  6. Hola

    Me llamo Paulina soy administradora de un directorio web/blog. Muy buen blog cultural, busco intercambiar enlaces. Por ello, me encantaría contar con tu sitio en mi directorio, consiguiendo que mis visitantes entren también en su web.

    Si estás de acuerdo. Házmelo saber al mail paulina.cortez@hotmail.cl

    Suerte con tu web! :)
    Pau

    ResponderEliminar
  7. Qué chula historia. Tus cosas siempre hacen crecer, hada


    ¡Besos!

    ResponderEliminar
  8. Contrapunto:

    Es difícil pero poco a poco uno se da cuenta de que cuanto menos juzga, mas libre se siente

    un abrazo

    ResponderEliminar
  9. Cordelia:

    Es un camino duro, pero nos libera.

    Sin embargo, tendemos a todo lo contrario, los humanos, somos unos vagos emocionales...

    besos

    ResponderEliminar
  10. Anjali

    Cierto, la verdad es relativa, nunca absoluta

    Pero parece ser que el que menos a de hacerlo, es el mas dogmático...será su inseguridad, ya sabemos que la preptencia es hija de la inseguridad...

    un abrazo preciosa

    ResponderEliminar
  11. Teresa;

    Creo que quién es capaz de respetar a los demás, aún pensando lo contrario, es alguién con una buena madurez emocional

    un abrazo hada

    ResponderEliminar
  12. Paulina:

    Puedes poner mi direccion en tu web

    saludos

    ResponderEliminar
  13. tita:

    Cuando lo he leido me vino a la cabeza que ...también podria hacer crecer fisicamente jajajaj

    Un abrazo grandote

    ResponderEliminar

La riqueza está en la variedad de opiniones