Pintura Raphael Soyer |
Quise acariciarla, cogerle la mano y decirle cuánto sentía su padecimiento, pero me dió vergüenza. Fue un momento terrible en el que descubres un ser humano maravilloso tras un crsital que te separa de él. Lo ves y no puedes tocarlo porque hace mucho tiempo que no lo intentas y has olvidado cómo traspasarlo con espontaneidad.
Fragmento de "Máscaras de papel
de Carmen Falcón
esa sensación de impotencia, la verdad nos limita y nos hace perder esa comunicación que sólo es posible con el contacto físico de una mano en el hombro, o en otra mano
ResponderEliminarHoy te diré algo de la pintura: me recuerda esas obras neorrealistas contemporáneas que vi hace muy poco en el museo de arte contemporáneo figurativo que hace poco han puesto por la zona del Born en BCN. Te lo recomiendo.
ResponderEliminarEfectivamente, qué grado de impotencia más grande y de incomunicación si no somos capaces de saltar la barrera y alargar la mano, buscando el contacto.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es el precio a pagar por la verguenza, ese condicionamiento al que nos sometemos forzosamente desde que nacemos. Dolorosísimo y la pintura absolutamente apropiada al texto. Bssssssss.
ResponderEliminarLas "malas"enseñanzas sociales nos limitan los afectos,la cercanía con los otros.Las vergüenzas no dan paso a los sentimientos y perdemos tanto !!
ResponderEliminarPero con una mirada hacia adentro podemos llegar a descubrir que una caricia,una palabra ,un escuchar puede dar vida a los otros.ES fácil si lo intentamos,créeme.
Besucos y gracias!
Gó
Que buen fragmento, ese cristal se disfraza de tantas formas en nuestra vida, en ocasiones de verguenza, en otras de fortaleza autoimpuesta y en otras de mandatos recibidos.
ResponderEliminarLa pintura es magnífica.
Besos Teresa.
Que buen fragmento, que real. Me ha pasado.
ResponderEliminarbexos y Sayonara
Tan real como la vida misma. Demostramos tan poco los sentimientos q al final olvidamos cómo se hacía.
ResponderEliminarBesoss
Aqui vengo emocionada de los enlaces que me has dejado en "acompañame", quiero felicitarte hija mía no puedes estar más orgullosa de quién tu sabés y yo omito por si quieres privacidad.
ResponderEliminarHe de hablar contigo porque me gustaría que me dieras permiso para hacer un post de él, del video de youtube que puedo insertar y acompañar con un texto, esto se merece pregonarlo pero naturalmente con tu permiso. Dime algo cariño. Un beso. Amelia.
Referente a tu entrada de hoy decirte que no nos es ajeno que muchos matrimonios llegan a un momento que son dos extraños, han vivido juntos pero sin sentir el vínculo y les separan unos centímetros pero en realidad hay miles de kilómetros entre ellos.
Para mí eso es fracasar en una relación, es engañarte a tí mismo, espero no llegar nunca a tener esa distancia con mi compañero de viaje.
Un beso y me has dejado muy emocionada, no sé puede ser más brillante y mas guapo, EJEM.
Besitos.Amelia.
Pluvisca, yo no se como lo haces para escoger esos fragmentos tan estupendos y que hacen meditar. Supongo que fruto de mucha lectura y mucho análisis de la misma.
ResponderEliminarCreo que todos nos sentimos identificados como cuando vemos a alguien muy enfermo y no nos atrevemos siquiera a abrir la boca por miedo o verguenza a no estar a la altura.
Un abrazo
Siempre tan acertada cuando escoges estos fragmentos de autores y libros diferentes. Nos tocas la fibra interior con ellos, cosa que yo, personalmente agradezco porque me inviatan a una reflexión sobre mi misma.
ResponderEliminarGracias
La pintura es sensacional, me encanta.
Un beso
Muy certero el fragmento Teresa.
ResponderEliminarLa vergüenza de expresar nuestros sentimientos provoca estas situaciones aunque la experiencia propia nos tiene que ayudar a superarla.
Abrazos y saludos afectuosos!
javier
ResponderEliminarSi, hay tantas cosas que nos enseñan de pequeños y que de mayores nos cortan la fluidez de las emociones...
Besos
Eastriver
ResponderEliminarEres una mina de oro encuanto a la inforamción. Cuando baje voy a verla.
Gracias y un peto
Juglar
ResponderEliminarSi, ese miedo al rechazo, al ridículo ...el orgullo...estamos cargados de prejuicios...
besos
emejota
ResponderEliminarYo creo que lo tomamos al crecer y ver lo que hacen los demás, esa educación que nos convierte en departamentos estanco...que triste
besos
Gó
ResponderEliminarSubrayo todo lo que dices, y si, es facil pero no para todo el mundo...esas enseñanzas nos manipulan el alma...
besos
Adriana Alba
ResponderEliminarSi, nos autoimponemos actitudes aprendidas desde lal infancia y que no sabemos que hay que saber fluir y dejarlas atras...
Besos
Marilyn Recio
ResponderEliminarLe pasa a mucha gente y nos perdemos tanto!!!
Besos
VANESSA
ResponderEliminarSi, la educación nos mete unas normas enla mente y si no aprendemos a saberlas saltar estamos perdidos
Besos
Amelia
ResponderEliminarGracias guapa, te mandé un email...
La entrada...es esa incapacidad de saltar el orgullo, el miedo al rechazo el...
Un abrazo
Jose Vte
ResponderEliminarYo digo lo mismo de tus relatos...
Si, has puesto un ejemplo muy bueno, muchas veces tememos decir algo por miedo al rechazo o a meter la pata ( inseguridad) cuando en realidad, tan solo con coger la mano basta...
besos
mj
ResponderEliminarGracias
Me gusta reflexionar y si eso también hace que lo hagais vosotros, entonces estupendo
Un abrazo
Antonio
ResponderEliminarSi, la educación nos pone muchas trabas...hay que saber saltarlas
Un abrazo
No me gustaría, pero conozco demasiado bien esa sensación y los sentimientos que se agolpan tras ese muro infranqueable.
ResponderEliminarVivimos en burbújas, lo que nos lleva a sufrir muchas carencias emocionales.
Un abrazo
Carmen
ResponderEliminarSi, demasiado orgullo mla canalizado...
besos
si...es asi... un cristal tenue.....o un telon de acero en algunos casos...
ResponderEliminarconozco algunas de esas barreras...
Un abrazo...¡¡¡
Déjame que te cuente
www.dejamequetecuente.net
Firenze
ResponderEliminarSi, cuanto nos perdemos, a veces, por no saber saltarla o que no nos dejn...
Un abrazo